Entender cómo afecta este factor es esencial para garantizar que tus clientes reciban un producto terminado óptimo y en las mejores condiciones.
Tanto el frío como el calor pueden influir significativamente en diversos factores de la leche soluble de tus máquinas de vending, como son:
- La disolución:
La temperatura del agua utilizada para preparar la leche soluble influye directamente en la disolución del polvo. Por eso, es crucial utilizar agua a la temperatura adecuada para asegurar que el polvo se disuelva completamente y se mezcle correctamente. TIP: Configurar la máquina para que el circuito de servicio de producto sea agua-producto-agua.
- Textura y cremosidad:
La temperatura también afecta la textura y cremosidad de la leche soluble. El agua demasiado caliente durante la preparación puede afectar negativamente la textura y sabor, y el agua demasiado fría puede no disolver adecuadamente el polvo, afectando a la consistencia y a la calidad del producto final.
- El sabor
La temperatura adecuada garantiza que la leche soluble mantenga el sabor auténtico de la leche. Una leche soluble conservada correctamente y preparada con la temperatura adecuada, mantendrá la mejor calidad y por tanto el mejor sabor.
- Propiedades organolépticas:
El exceso de calor durante el almacenamiento de la leche soluble puede alterar sus propiedades organolépticas y reducir su vida útil. Por eso, es importante almacenar la leche soluble para vending en un lugar fresco y seco hasta el momento de su dispensación. Ya que una temperatura elevada puede producir enranciamiento del producto.
¿Qué temperaturas son adecuadas para la leche soluble para vending?
Si hablamos de almacenamiento, para mantener la frescura y calidad de la leche soluble, es importante guardarla en un ambiente fresco y seco. Las altas temperaturas pueden afectar negativamente la calidad del producto, causando aglomeración o cambios en la textura y el sabor. Nuestra recomendación es que no guardes la leche soluble para tus máquinas de vending en ambientes con una elevada humedad ni a temperaturas superiores a los 25ºC. Por otro lado, la temperatura más adecuada para el agua en la preparación de leche soluble en máquinas de vending generalmente se encuentra entre 70°C y 80°C. Esta temperatura es ideal para disolver completamente el polvo de leche y asegurar que la bebida resultante tenga la textura adecuada, el sabor óptimo y la cremosidad deseada.
